martes, 18 de diciembre de 2012

Detalles


La mayoría, son cosas insignificantes. Cosas que si uno no está atento a ello, apenas lo ve... Pero son cosas reales, cosas que existen, y existen gracias a que él, las hace posibles.
Dice que no me doy cuenta de ellas, pero que no se lo esté diciendo continuamente, no significa que no las vea...
Dice que no las sé valorar, y lo dice porque en ocasiones le reprocho esas cosas... Lo que no sabe es que no sólo las valoro, sino que además me son hasta necesarias para saber cuanto le importo. Lo que pasa es que, soy muuuy egoísta,y cuando hace ese tipo de cosas, solo pienso en el momento en que volverá a hacerlas, en lugar de disfrutarlas... Si es que, quiero mas y mas... ¡Soy insaciable!
Son cosas que me sacan una sonrisa. Cosas que me demuestran lo que realmente soy para él. Cosas que solo me las dice a mi, o que las hace por mi, para que me sienta bien.
Cosas tan tontas como quitarme las espinas del jersey para que no me pinche, aunque para ello tenga que tirarse un buen rato con ello. Prepararme un batido de chocolate, porque sabe que no me gusta lo que hay de postre. Acordarse de cosas que dije hace tiempo, y pasarse meses buscándolo pr todas partes para regalármelo por mi cumpleaños...

lunes, 10 de diciembre de 2012

Minicuentos 2012 (Concurso metro de Madrid)



- Lunes por la mañana.

Pico el abono. Estamos a principios de diciembre, lo acabo de estrenar. Paso la puerta y me dirijo hacia la escaleras... Llegó al anden, abarrotado de gente como todas las mañanas. ¡ Todavía quedan cinco minutos hasta que venga el metro! Esta vez llegaré tarde a clase... cuando por fin llega, la gente se amontona dentro para que entremos los demás. Son tres paradas hasta llegar. "Próxima parada Ciudad universitaria". Bajo aquí, como la mayoría de los jóvenes del vagón. Salgo del metro. subo las escaleras. Miro a lo lejos. Ahí está mi Facultad... Otro lunes mas mi obligación me espera.



- Por buen camino.

Salgo de casa temprano. Hoy he quedado en el centro de Madrid con Alicia. cojo el metro desde Goya. Apenas son siete paradas hasta Callao. Bajo las escaleras y entro en el vagón justo antes de que se cierren las puertas tras de mi, como esperado a que yo entrara. La gente murmura a mis espaldas; los oigo... "Próxima parada Callao. correspondencia con linea tres y cinco." Salgo al exterior y alguien me agarra la mano. "Creía que tendrías problemas para llegar", me dice Alicia. "Menos mal que Yoki es un buen perro guía".



- De otro mundo.

Habría jurado ver un magnifico ser espectral justo antes de entrar en la estación de Príncipe Pío... ¡Serían imaginaciones mías! Pero es que al bajar las escaleras y dirigirme al anden, un velociraptor se había cruzado en mi camino, haciendo que parase mi marcha y dejándome al borde del colapso... Cuando entro al vagón, cojo sitio y me siento, y a mi lado encuentro un bellisimo unicornio que me habla... Le pregunto que está pasando, y... "Brip, brip, brip" ¡El maldito despertador! Otra vez ese dichoso sueño...